lunes, septiembre 18, 2006

GDF se ufana a saturación de cárceles

Para mí la sociedad ideal es que la trata con dignidad a todos, en especial a los más desfavorecidos, a los enfermos, a los más pobres.... y en especial a los prisioneros. Hoy en Estados Unidos existe una guerra política feroz entre el presidente Bush y los senadores de su partido porque él quiere que pasen una ley que la da derecho de torturar prisioneros, derecho que la Suprema Corte le quitó recientemente. John McCain, ex prisionero de guerra en Vietnam y torturado ahí, se opone con otros reconocidos repúblicanos a esa iniciativa, y lo hace argumentando que no se puede luchar por la democracia y la paz (argumentos que usa la Casa Blanca para que se pase la ley) a través de romper la dignidiad de otros, y en especial, de los prisioneros.

Extrañamente el Gobierno del Distrito Federal usa argumentos similares para presumir la saturación de las prisiones de la capital los años recientes: que ésta ha ayudado a mantener la paz social. Ayer lo presumió Alejandro Encinas en su informe anual de labores como un logro alcanzado. El sencillamente dijo que entre más personas están en la cárcel - y la mayoría son hombres jóvenes pobres - más baja la inseguridad en la ciudad... ¿Será cierta esa causalidad tan directa? No lo creo. Al contrario, la inseguridad no ha bajado como sabemos los capitalinos. La ciudad es ya escenario de matanzas entre narcos, la droga se vende por doquier, los ciudadanos deben vivir en calles amuralladas si pueden... pero Encinas dice que todos estamos equivocados.

Afirmó ayer que la población penintenciaria en el DF era entre 1994 y 1995 era de 7 mil a 8 mil reos, cifra que es hoy la de sólo el Reclusorio Varonil Oriente! Hoy en todas las prisiones hay 33 mil reclusos, lo que creado terribles condiciones de hacinamiento. Y si van a las prisiones verán que la droga es la reina dentro. ¿Y quién la mete? Respuesta: No lo pueden hacer los prisioneros. Los derechos de los reos a una readapatación social son negados por parte del gobierno capitalino. Y la verdad no creo que Ebrard cambie esto, ya que el cree en la famosa cero tolerancia de Giuliani, de donde proviene esta pesadilla.

Si una condición para que la capital sea la "Ciudad de la Esperanza" es que las cárceles se saturen, pues que triste esperanza la de la izquierda amlista. Que triste que para defender la paz se rompa la dignidad del prisionero, luego se rasgan las vestiduras por los derechos humanos en otros territorios - me acuerdo cuando AMLO recibió al Dalai Lama - pero no pueden cumplirlos cuando gobiernan el propio.

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