viernes, agosto 24, 2007

Las prioridades de la iglesia católica

El actual Papa, Benedicto XVI, cuando era prefecto de la congregación para la doctrina de la fe (lo que era antes la Inquisición) encubrió, a través de una carta confidencual que envío en 2001 a los obispos de todo el mundo, investigaciones a sacerdotes acusados de abuso sexual. Le pedía a los obispos que mantuvieran las acusaciones de los fieles lo más secretas posibles. Afirmaba que la iglesia tenía el derecho de mantener las evidencias como confidenciales del ojo público, incluída - claro - la justicia civil.

Hoy la Conferencia Episcopal de Guatemala se moviliza como nunca antes para impedir algo. ¿Que un sacerdote abuse sexualmente de alguien? No, que un sacerdote case a una pareja que se quiere. ¿Cuál sería el problema? Es una pareja gay... (vídeo).

Lástima como olvidan a Jesús y una gran frase de él: quiero amor, no sacrificios... (Mateo 9:13)

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